Hoy más que nunca vemos la necesidad de ajustar nuestras finanzas por la incertidumbre de cuánto tiempo tomará para que pase esta pandemia. Por ello, quiero compartirles una guía para que puedan realizar un presupuesto personal o en pareja para reducir cualquier riesgo con una mirada a mediano plazo.
Usaré como referencia para este paso a paso una plantilla que he diseñado (con números de ejemplo), la cual pueden descargar en el link en mi perfil de Instagram: @carlos.angelesx. Estas son algunas razones importantes para hacer un presupuesto personal:
- Te dará tranquilidad al tener el control de tus finanzas
- Podrás organizarte para cumplir tus metas a mediano plazo
- Te permite planificar un fondo de emergencia para crisis como esta
- Podrás identificar tus hábitos vinculados al gasto y tomar acción
Paso 1: Presupuesta con base a metas que te muevan
Identifica qué metas quieres lograr en los próximos 1-2 años y planifica el ahorro mensual que necesitas para cumplir con tu meta en el plazo determinado. Esto es pagarse a uno mismo primero: ahorrar una parte de nuestros ingresos para cumplir nuestros sueños.
Paso 2: Presupuesta un fondo de emergencia
Un fondo de emergencia es un colchón de dinero al que se puede recurrir inmediatamente cuando se presenta una emergencia. Es recomendable que cubra nuestros gastos elementales por hasta 3 meses. Si ya lo tienes, asegúrate que esté rindiendo en una cuenta de ahorros lo máximo posible, pero si no, constrúyelo en los próximos meses.
Paso 3: Presupuesta los ingresos y gastos para los próximos meses
Estímalos de la mejor forma. Sé que puede ser complicado si es que nunca antes lo has calculado pero puedes recurrir a boletas, recibos, estados de cuenta, etc. Si será algo incierto, coloca el peor escenario posible. Propongo hacerlo hasta fin de año, pero si te parece muy tedioso, hazlo para los próximos 3 meses. En la plantilla te propongo varias opciones de categorías y conceptos pero considera todas las que aplican para ti.
Paso 4: Ajusta tu presupuesto personal definiendo una meta de ahorro
El ahorro acumulado es la diferencia entre los ingresos y gastos, más el ahorro que tienes acumulado a la fecha en efectivo, cuentas bancarias o inversiones. Verás en la plantilla que el presupuesto para metas y fondo de emergencia lo considero en “Gastos” por el concepto de pagarse a uno mismo primero. Pero forma parte del ahorro acumulado hasta que no gastes en cumplir esa meta o hagas uso del fondo de emergencia ante una situación inesperada.
Si quieres mejorar este monto, tendrás que generar más ingresos o reducir tus gastos. Si decides ajustar gastos, identifica qué gastos son innecesarios o qué gastos variables puedes reducir.
Paso 5: Registra tus ingresos y gastos reales periódicamente
Registra todo con la frecuencia que mejor se acomode a ti en la hoja “Real”, que tiene los mismos conceptos de la hoja “Presupuesto”. Los ingresos y gastos fijos ya los conoces, por ello, enfócate en registrar todo lo variable (ingresos extras, alimentación, transporte, gastos personales, etc).
Si todo lo que has registrado está bien, debe cuadrar tu ahorro acumulado real del mes de la plantilla con lo que tienes en efectivo, cuentas e inversiones al cierre del mes. Si un monto pequeño no cuadra, ingrésalo en «otros gastos». Sé constante para registrar tu información todos los meses.
Paso 6: Al cierre de cada mes, compara tu real vs. tu presupuesto personal
Lo que no se mide, no se puede mejorar. Primero, revisa cómo te fue en tu ahorro total acumulado real versus el presupuestado. Si es menor el real, revisa las variaciones que hubo en cada concepto para identificar dónde estuvieron las diferencias.
Si ves que te estás alejando de tu meta y te frustras por eso, ajusta tu presupuesto a tal punto que nuevamente te sientas cómodo con una meta de ahorro acumulado.
Paso 7: Sé constante e identifica hábitos que podrías cambiar
El control de nuestro presupuesto tiene que ser un hábito. No te olvides de mantener este archivo actualizado todos los meses para poder llevar bien la cuenta de nuestros ingresos y gastos.
Nos hará darnos cuenta de gastos que podemos ahorrar cambiando ciertos hábitos (por ejemplo: menos delivery, cigarros, bares, etc). O quizás también que debemos empezar a generar más ingresos. Si es así, esfuérzate en conseguir el aumento que mereces, en encontrar un trabajo mejor pagado o en buscar otras fuentes de ingreso para poder ahorrar.
Si las grandes empresas tienen un presupuesto, ¿por qué tú no tendrías un presupuesto personal si eres la empresa más importante a gestionar?
Escrito por: Carlos Angeles
Instagram: @carlos.angelesx