El tiburón se llama Perú

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Hoy les quiero compartir una fabula japonesa que encontré de manera anónima en internet que se asemeja al camino de cualquier emprendedor:

“Los japoneses siempre han gustado del pescado fresco. Pero las aguas cercanas a Japón no han tenido muchos peces por décadas. Así que para alimentar a la población japonesa, los barcos pesqueros fueron fabricados más grandes para ir mar adentro.

Mientras más lejos iban los pescadores más era el tiempo que les tomaba regresar a entregar el pescado. Si el viaje tomaba varios días, el pescado ya no estaba fresco. Para resolver esta situación, las compañías instalaron congeladores en los barcos pesqueros. Así podían pescar y poner los pescados en los congeladores.

Sin embargo, los japoneses pudieron percibir la diferencia entre el pescado congelado y el fresco, y no les gustaba el congelado. Por lo tanto, este se tenían que vender más barato.

Las compañías instalaron entonces en los barcos tanques para los peces. Así podían pescar los peces, meterlos en los tanques y mantenerlos vivos hasta llegar a la costa.

Pero después de un tiempo los peces dejaban de moverse en el tanque. Estaban aburridos y cansados, aunque vivos. Los consumidores japoneses también notaron la diferencia del sabor, porque cuando los peces dejan de moverse por días pierden el sabor fresco…

¿Cómo resolvieron esta situación las compañías japonesas? ¿Cómo consiguieron traer pescado con sabor de pescado fresco?
Para mantener el sabor fresco de los peces, las compañías pesqueras ponen a los peces dentro de los tanques en los botes, pero ahora ponen también un tiburón pequeño.

Claro que el tiburón se come algunos peces, pero los demás llegan muy, pero muy vivos. ¡Los peces son desafiados! Tienen que nadar durante todo el trayecto dentro del tanque,¡para mantenerse vivos!”

Mis 5 consejos a todos los emprendedores son:

  1. Sé positivo

El tiburón representa los desafíos que la vida te propone. Perú es uno de los países con mayores índices de emprendimiento en la región y esto sucede porque hay una proporcionalidad entre la cantidad de “tiburones” y el desarrollo de negocios. Estarán siempre los peces que se quejen por estos “tiburones” y los que comiencen a ver las oportunidades que los mismos generan. ¿Cuál quieres ser tú?

Un emprendedor estará rodeado de situaciones adversas, es necesario que confíes en tus capacidades.

  1. Edúcate

Los peces más inteligentes son los que observan los errores de los demás para no repetirlos. Los estudios nunca acaban en una universidad o colegio, si te interesa un tema esfuérzate por ser el mejor y el que más sabe, usa internet, libros y todos los medios que estén a tu alcance.

Sobre todo, aprende de las personas que ya han recorrido los caminos por donde deseas ir. Un dicho dice: “Inteligente es el hombre que aprende de sus errores, pero es sabio el que aprende de los errores de los demás”.

  1. Sé activo

Los peces que sobreviven son los que se mantienen en constante movimiento. Hay una diferencia muy grande entre saber y hacer. Esa es normalmente la que diferencia a el éxito del fracaso.

Los emprendedores son personas que ven una oportunidad donde otros ven un desafío , pero no se limitan a observar, sino a tomar acción masiva sobre este y desarrollar un modelo sostenible en base al mismo.

  1. Sé apasionado

Los peces que tienen un motivo por el cual vivir tendrán una ventaja respecto a los otros. Muchas veces me preguntan cual es el mejor negocio a desarrollar y la respuesta es: el que te apasione. Pues será algo que tendrás que hacer todos los días, incluido feriados y domingos durante los próximos años.

Busca dentro de tus aficiones, algo que te haga sonreír y disfrutes al hacerlo sin importar las recompensas que puedas obtener derivado al éxito del mismo.

  1. Sé curioso

A diferencia de los peces, en el mundo del emprendimiento no debes estar bien siempre, pero basta con acertar bien un emprendimiento para estar bien por siempre. Las oportunidades están a la vista de todos, solo debes abrir los ojos y comenzar a hacer preguntas.

Agradece que hay un tiburón…y se llama Perú.

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