Dada la coyuntura, algunas personas pueden estar pensando optar por préstamos para cumplir con sus obligaciones o quizás para tener capital de trabajo para un emprendimiento. Debemos tener mucho cuidado al asumir una deuda ya que la tasa promedio de un préstamo personal es de 19% (Fuente: SBS), lo cual significa un alto pago de intereses.
Además, un préstamo significa el pago de una cuota mensual que debe ser planificada en nuestro presupuesto de tal forma que no pasemos apuros más adelante.
Antes de endeudarse, definitivamente hay que preguntarse si de todas formas necesitamos el préstamo o podríamos esperar hasta poder asumir con nuestros ahorros lo que debemos pagar.
Si de todas maneras necesitamos crédito, a continuación, comparto algunas recomendaciones para endeudarse correctamente.
Busca las mejores condiciones
Lo más importante del crédito es la tasa a pagar por lo que debemos buscar que sea la menor posible. Para ello, debemos pedir la evaluación de distintos bancos y compararlos en términos de la TCEA (tasa de costo efectiva anual), ya que incluye el costo total que debes pagar por el crédito por concepto de intereses, comisiones y gastos.
Lo recomendable es hacer la solicitud en la última semana del mes, ya que es ahí cuando aumentan las posibilidades de negociar las tasas porque los bancos dan flexibilidades a sus vendedores para disminuir la tasa con tal de asegurar el crédito. Esta negociación se debe hacer con el banco que nos dio la menor TCEA.
Otro factor importante es el valor de la cuota. Esta no debe superar el 40% del ingreso neto porque caso contrario puede afectar a tus finanzas. Por ello, busca un plazo conveniente que te permita pagar la deuda en el menor tiempo posible sin afectar tu mes a mes.
Por último, es importante que toda deuda que tomemos sea en la moneda en la que generas ingresos, ya que de esa forma eliminas el riesgo del tipo de cambio. Sobre todo en estas épocas donde el tipo de cambio está muy volátil, no sería recomendable asumir una deuda en dólares cuando ganamos en soles, o viceversa.
Haz producir tu Deuda
No todas las deudas son malas. Una deuda es buena si se paga sola porque el activo físico o intelectual que adquirimos nos hará generar mayores ingresos en un futuro que la deuda total. Por ejemplo, endeudarnos para nuestra educación o para un negocio que ya tenemos analizado y validado en el mercado, nos debe permitir generar mayores ingresos.
También está bien endeudarnos si es que compramos un activo que aumenta su valor en el tiempo. Por ejemplo, un inmueble para alquilar o un objeto de colección nos permiten tener una rentabilidad superior al costo de la deuda gracias a la plusvalía.
Evalúa prepagar tu Deuda
Si cuentas con un excedente considera hacer prepagos a la deuda. Si estás buscando bajar la deuda de manera más rápida y pagar menos intereses en el tiempo, te conviene reducir el plazo. Si buscas tener más liquidez mes a mes o te está costando pagar las cuotas, te conviene reducir la cuota.
Considera también para el prepago no tener una alternativa de inversión más conveniente. Por ejemplo, si tu deuda tiene una TCEA de 12% y tienes la opción de invertir a un 15% anual de ganancia neta, los ingresos que ganes por la inversión van a ser mayores a los intereses que ahorres por el prepago, por lo tanto, te conviene invertir.
Escrito por: Carlos Angeles
Instagram: @carlos.angelesx