Los sesgos cognitivos son tendencias sistemáticas en la forma en que las personas procesan información, que pueden distorsionar la percepción de la realidad y llevar a decisiones poco razonadas, descubre cuáles son los que más afectan nuestras inversiones.

¿Qué son los sesgos cognitivos?

Los sesgos cognitivos son un campo importante de estudio en psicología y neurociencia, y tienen implicaciones importantes en áreas como la toma de decisiones, la comunicación y la inteligencia artificial.

Sesgo de exceso de confianza

El sesgo de exceso de confianza en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas tienen una confianza excesiva en sus propias habilidades de inversión, lo que las lleva a subestimar el riesgo y sobreestimar sus posibilidades de éxito. 

Este sesgo puede manifestarse en una variedad de formas, como el creer que se tiene un conocimiento superior al de los demás inversores, o el subestimar la probabilidad de eventos negativos. 

El sesgo de exceso de confianza también puede llevar a las personas a no diversificar su cartera de inversiones, lo que aumenta el riesgo de pérdidas significativas si una inversión individual no funciona como se esperaba. 

Este sesgo es un problema común en el campo de la inversión, y se ha demostrado que contribuye a la toma de decisiones poco razonadas y a la pérdida de dinero.

Sesgo de ilusión de control

El sesgo de ilusión de control en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas creen tener un control y comprensión más alto de los eventos futuros y su impacto en sus inversiones, lo que las lleva a tomar decisiones de inversión poco racionales. 

Este sesgo se manifiesta en la creencia de que se pueden predecir y controlar eventos impredecibles, como las fluctuaciones del mercado, o en la creencia de que se tiene una ventaja sobre otros inversores. 

Esto puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión arriesgadas, basadas en suposiciones poco realistas, en lugar de basarse en análisis objetivos y fundamentos financieros. 

La ilusión de control también puede llevar a las personas a subestimar el riesgo y a sobreestimar su capacidad para controlar las pérdidas potenciales. 

Es importante tener en cuenta que el futuro es incierto y no se puede predecir con certeza, y es importante tomar decisiones de inversión basadas en un análisis objetivo y fundamentos financieros.

Sesgo de confirmación

El sesgo de confirmación en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas tienden a buscar y dar más peso a la información que confirma sus creencias existentes sobre una inversión en particular, en lugar de buscar y considerar información que podría desafiar o refutar esas creencias. 

Este sesgo puede manifestarse en varias formas, como ignorar o minimizar información negativa sobre una inversión en la que se ha confiado, o buscar activamente información que respalde un punto de vista ya establecido. 

Este sesgo puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión poco razonadas, basadas en creencias no fundamentadas, en lugar de basarse en análisis objetivos y fundamentos financieros. 

Es importante buscar y considerar información tanto positiva como negativa sobre una inversión, y mantener una mente abierta a la posibilidad de que una inversión en la que se ha confiado puede no ser tan sólida como se pensaba.

Sesgo de anclaje

El sesgo de anclaje en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas basan sus juicios y decisiones en un punto de referencia o «ancla» inicial, en lugar de basarse en un análisis objetivo y fundamentos financieros. 

Este sesgo se manifiesta cuando una persona se basa en el precio de compra original de una inversión para determinar su valor actual, en lugar de basarse en un análisis actual del rendimiento financiero de la inversión. 

El sesgo de anclaje también puede manifestarse cuando una persona se basa en el precio de compra de otras inversiones similares para determinar el valor de una inversión en particular. 

Este sesgo puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión poco razonadas, basadas en un punto de referencia que no tiene relación con la realidad actual. 

Es importante basar las decisiones de inversión en un análisis objetivo y fundamentos financieros, y no basarse en un punto de referencia inicial o en comparaciones con otras inversiones.

Sesgo de autoridad

El sesgo de autoridad en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas tienden a seguir el consejo o las recomendaciones de individuos o instituciones que perciben como expertos o autoridades en el campo de las inversiones, sin cuestionar su fundamento o considerar otras perspectivas. 

Este sesgo se manifiesta cuando las personas confían en las recomendaciones de un gurú de las inversiones, un analista de mercado, un corredor de bolsa o una compañía de inversiones, en lugar de hacer su propia investigación y análisis. 

Este sesgo también puede manifestarse cuando las personas confían en las recomendaciones de amigos o familiares, o cuando se sienten presionados por la opinión de la mayoría. 

Este sesgo puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión poco razonadas, basadas en la opinión de otros, en lugar de basarse en un análisis objetivo y fundamentos financieros. 

Es importante hacer su propia investigación y análisis antes de tomar decisiones de inversión, y considerar múltiples perspectivas y opiniones antes de tomar una decisión.

Sesgo de prueba social

El sesgo de prueba social en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas tienden a seguir las decisiones de inversión de otros, en lugar de basarse en su propia investigación y análisis, debido a la creencia de que las decisiones de inversión de los demás son una «prueba social» de la validez de esas decisiones. 

Este sesgo se puede manifestar cuando las personas invierten en una compañía o un activo solo porque muchos otros están haciendo lo mismo, o cuando las personas evitan invertir en una compañía o un activo solo porque otros están evitandolo. 

Este sesgo puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión poco razonadas, basadas en la opinión de otros, en lugar de basarse en un análisis objetivo y fundamentos financieros. 

Es importante ser crítico y no seguir ciegamente las decisiones de inversión de otros, y hacer su propia investigación y análisis antes de tomar decisiones de inversión.

Falacia de coste hundido

La falacia de coste hundido en las inversiones es un sesgo cognitivo en el que las personas siguen invirtiendo en una inversión poco rentable debido a la cantidad de recursos, tiempo o dinero que ya se han invertido en ella, en lugar de abandonarla y buscar otras opciones de inversión más rentables. 

Este sesgo se manifiesta cuando las personas siguen invirtiendo en una inversión perdedora debido a la cantidad de dinero que ya han invertido en ella, o cuando las personas siguen invirtiendo en una empresa o un proyecto poco rentable debido a la cantidad de tiempo y recursos que ya se han invertido en él.

Este sesgo puede llevar a las personas a tomar decisiones de inversión poco razonadas, basadas en el dinero o el tiempo que ya se ha invertido, en lugar de basarse en un análisis objetivo y fundamentos financieros. 

Es importante ser crítico y evaluar continuamente el rendimiento de una inversión, y estar dispuesto a cerrar una posición perdedora y buscar otras opciones de inversión más rentables.